Siempre que la revelo con ilusión, creyendo ver hospitalidad en X ojos, donde en su lugar sólo hay desinterés...
La desprecian. Tarde o temprano. Siempre.
Ahora, sólo le he dado la clave del candando de mi alma a una sola persona que nunca la tiraría.
A no ser que intentéis averiguarla, nunca podréis liberarla...
Porque en estos momentos no me veo con fuerzas para revelarla a nadie más...
La desprecian. Tarde o temprano. Siempre.
Ahora, sólo le he dado la clave del candando de mi alma a una sola persona que nunca la tiraría.
A no ser que intentéis averiguarla, nunca podréis liberarla...
Porque en estos momentos no me veo con fuerzas para revelarla a nadie más...
No es miedo, es invulnerabilidad.
A las buenas intenciones y a las malas.
Es no saber distinguirlas.
Cuantos chascos nos llevamos en esta vida y cuantas veces creemos estar seguros de estar haciendo lo correcto, para que despues te den una puñalada por la espalda...
ResponderEliminarAunque por otra parte, si siempre vamos con ese miedo, nunca acertaremos porque nisiquiera lo intentaremos....
es una de las paradojas de la vida....
Siempre debemos discriminar en que confiar, el mundo no es para todos semejante, no todos son igueales, debemos que enfocar nuestros sentimientos, y crearnos un escudo contra el dolor.
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